"Altísimo, omnipotente, buen Señor, tuyas son las alabanzas, la gloria y el honor y toda bendición...Loados seas, mi Señor, con todas tus criaturas, especialmente por el hermano sol...Loados seas, por la hermana luna y las estrellas... Load y bendecid a mi Señor y dadle gracias y servividle con gran humildad" (Cantico).
El corazón de Francisco es tan grande que se ha llenado del amor que Dios manifestaba en las criaturas. ¡Alabado seas Señor por todas las criaturas! Todo ha sido creado para Cristo y todo encuentra razón y finalidad en Cristo. La creación entera, en definitiva, es una fraternidad compuesta por los hermanos muy diferentes, pero al fin y al cabo hermanos. Y el primero, el mayor y más santo, Jesucristo.
Traen la significación de Dios, diría el padre san Francisco; es decir, están glorificando continuamente a su Creador. El amor y respeto a la creación entera no tiene finalidad en sí misma, sino que sigue avanzando hasta la consumación de todo en Cristo, pues por Él y para Él fueron creadas todas las cosas.
La creación formaba una fraternidad universal. Todos son hermanos, no hay enemigos ni desconocidos. Todo habla de Dios Padre. Este sentido de la paternidad de Dios es lo que hace que Francisco llamara a todos hermanos: hermano sol, hermana luna, hermana muerte... Es que Francisco vive en el presente del amor de Dios por todas sus criaturas.
Así como no conviene acostumbrarse a los venenos del aire y por eso el compromiso ecológico constituye hoy una prioridad, se debería actuar del mismo modo con respecto a lo que corrompe el espíritu.
Amigo de los pobres, amado por las criaturas de Dios invitó a todos -animales, plantas, fuerzas naturales e incluso al hermano sol y a la hermana luna- a honrar y alabar al Señor. El pobre de Asís nos da testimonio de que estando en paz con Dios podemos dedicarnos mejor a construir la paz con toda la creación, la cual es inseparable de la paz entre los pueblos...
La figura de Francisco es inseparable de este inmenso amor, que convoca al universo entero a entrar con él las alabanzas de Dios en todas sus criaturas.
15 días con Francisco de Asís. Card. Carlos Amigo Vallejo.
Resumen del decimotercer día
No hay comentarios:
Publicar un comentario